El exilio
Por un caso de violación, Roman Polanski aún no puede regresar a Estados Unidos
04.04.2017
LOS ÁNGELES (Uypress) – El director polaco de 83 años sufre un nuevo revés ante la justicia de Estados Unidos, que vuelve a rechazar su petición de regresar luego de que dejara el país en 1978 por evitar una sentencia por violar a una menor de 13 años.
Foto: The Hollywood Reporter
En 1978, en Hollywood, el polaco Roman Polanski ya era un director consagrado con películas de renombre como La semilla del diablo (1968) y Chinatown (1974).
También era conocido por un enorme número de estadounidenses alejados del cine por ser la pareja de la actriz y modelo Sharon Tate, salvajemente asesinada en su casa junto a un grupo de amigos en 1969 por una runfla de asesinos liderada por Charles Manson mientras estaba embarazada de ocho meses de un hijo de Polanski.
Polanski abandonó Estados Unidos hace cuatro décadas e intenta nuevamente volver, hoy a sus 83 años. Pero la justicia local le ha vuelto a negar la petición, lo que hace suponer que es probable que el cineasta no vuelva a pisar suelo americano sin marchar a prisión.
El motivo: al cineasta se lo acusa de haber violado a Samantha Gailey, una menor de 13 años durante una sesión de fotos/fiesta en casa del actor Jack Nicholson en el barrio exclusivo de Mullholland (Hollywood). Corría el 11 de marzo de 1977.
El escándalo en su momento fue tremendo: los padres de Gailey arremetieron contra Polanski, quien, según la parte acusadora y testimonio de la menor, la drogó con quaalude (medicamento que relaja), la sodomizó y le obligó a que le efectuara una felación.
Mientras Gailey manifestó que fue violada, el director que dirigiera a su amigo Nicholson en Chinatown dijo que hubo "sexo consentido" con la menor. Estuvo 42 días tras las rejas y salió bajo una fianza de US$2.500.
Antes de escuchar sentencia, Polanski decidió volar de Estados Unidos. En las décadas posteriores ganó un Oscar (en 2003 como mejor director por El pianista) y ha residido en Francia, Suiza, Polonia, siempre temiendo y evitando una posible extradición a Estados Unidos para enfrentar su juicio. Obtuvo la nacionalidad francesa.
Años atrás, Samantha Gailey (quien cambió su apellido a Geimer) perdonó a Polanski y ha pedido a la justicia que cierre el caso. En 2013 publicó su autobiografía, The Girl. A life in the shadow of Roman Polanski (La chica. Una vida a la sombra de Roman Polanski), donde cuenta el incidente que le marcó su adolescencia y juventud, marcada por el consumo de alcohol, drogas y una vida disipada.
Ante la nueva situación de retomar la sentencia y terminar con el caso, Polanski y sus abogados buscaron primeramente que se lo juzgara en ausencia. Lo que se conoce como un "anticipo" antes de decidir pisar nuevamente Estados Unidos. Esto no corre, ya que la justicia estadounidense no piensa hacer excepción ni trato especial (garantías) con Polanski, figura pública.
"El juez Scott Gordon decidió que la petición del acusado y sus correspondientes solicitudes sean rechazadas (...) no se apreció base suficiente o convincente para reconsiderar estas cuestiones", indicó un documento de la Corte Superior de Los Ángeles.
"Además, el abogado defensor no presentó pruebas suficientes, creíbles y admisibles, ni documentos legales para apoyar la reparación solicitada", escribió Gordon en el fallo publicado, de unas 13 páginas.
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias