¿Marx, Confucio, o... quién?
Luis Fernández
11.11.2021
No nos gusta decir: “Tenemos esperanza de...” “Ojalá ocurra tal cosa...”; como aficionados o hinchas de la ciencia, buscamos basarnos en los hechos y sacar conclusiones. Por supuesto que muchas veces erramos, seguramente porque los “hechos” tal vez no fueran tales, o no los supimos evaluar. Pero a esta altura de nuestra vida, nos resistimos a transformarnos en idealistas y vivir en base a deseos.
Trabajemos algunas palabras:
Autocrítica: Es probable que algunos al leerla, se digan: "Otra vez con este tema!!" Nada más alejado de mí que iniciar una enésima "autocrítica" NO. Sólo quiero precisar algunas reflexiones respecto de la palabra.
Cada vez que realizamos alguna gestión (la que sea) al volver a nuestra casa, ya sea caminando o en vehículo, venimos evaluando cómo nos fue; esto surge casi naturalmente.
En todo partido político en el mundo, luego de una derrota electoral, sus militantes, como les sucede en la vida diaria, se plantean alguna autocrítica.
Es muy probable que ese partido que aspira a seguir existiendo, realice su autocrítica. Pero seguramente esa "verdadera" autocrítica quede de puertas hacia adentro, de alguna forma es algo muy íntimo. Por ahí se dice: "Nadie se va a abrir en canal frente a los adversarios". Esto es válido para la izquierda, la derecha y el centro.
Entonces el problema de la autocrítica en el FA, no es que la ciudadanía sepa cuál o cuáles fueron esas autocríticas. Lo interesante es saber si se hizo alguna, aunque no nos digan los detalles. ¿Por qué? Porque esas conclusiones deben ser naturalmente la base de la nueva estrategia.
No debemos pasar por alto, que si bien el FA es un partido en lo formal, en la práctica es un frente. Es muy probable que sus sectores hayan hecho su autocrítica particular; pero no basta ser muy adivinos, para decir que muy probablemente no coincidan esa autocríticas sectoriales.
Entonces estamos en la casilla de salida.
Según la mayoría de los politólogos, el FA estuvo a la defensiva desde las elecciones, hasta que se presentaron las 800.000 firmas.
Pero también existe la casi unanimidad de opiniones, de que a ese número de firmas se llegó en el último tramo y por gracia de las organizaciones sociales y militantes de base del FA. La dirigencia no aportó casi ideas novedosas para esa campaña, incluso hubo dirigentes que no creían se llegara a ese número. Por tanto es evidente que esto de los 135 artículos fue una reacción ante la embestida del gobierno. De estrategia nada.
Luego apareció toda la enorme discusión, sobre la interna, que aún continúa y que me resisto a enumerar. Esto estaba en la agenda del futuro, así que de estrategia nada.
Algunos analistas opinan que el momento de las firmas fue un cambio de tendencia, pero duró poco; y hoy el gobierno continúa con su "restauración".
Internacionalismo. Qué palabreja!!
¿Cuánto hace que en el FA no se tratan temas internacionales?
Ojo no nos referimos a apoyar a Cuba cuando desde el imperio aparecen gestos agresores.
Estamos reclamando una mínima posición respecto a lo que pasa en el mundo.
¿El FA ha captado el desarrollo de la ultraderecha en el mundo, en especial en A.L.? ¿Qué posturas va a tomar el FA respecto a la estrategia de VOX de impulsar su prédica en distintos países de A.L.?.
¿Ha observado el FA, la indefensión en la que se encuentran las distintas izquierdas latinoamericanas? ¿Cómo no es posible que se intenten acuerdos mínimos? Hoy con una computadora en cada casa de cada país se pueden realizar los encuentros más numerosos que se hayan hecho jamás en la historia.
Acá viene una gestora yanky a dar casi órdenes a nuestro país y al Perú. Qué casualidad! Dos países de A.L. donde su población mediante firmas o elecciones se han parado firme frente a esos gobiernos...y la señora viene a hablar de temas de "Seguridad"...
¿Cuando el FA va a impulsar contactos con otras izquierdas hermanas?
Pero disculpen que distraiga a algunos, el FA tiene elecciones internas en diciembre y luego nos vamos a la playa.
Luis Fernández
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias