Los primeros 500 días del segundo gobierno frenteamplista
Alfredo Asti
05.09.2011
Los resultados sociales en estos primeros 500 días de nuestro segundo gobierno de izquierda son dignos de destacar en primera instancia y son el resultado de la continuidad del esfuerzo que ya veníamos realizando desde nuestro primer gobierno.
Cabe destacar la contribución directa que el nivel de la actividad económica uruguaya aporto a la obtención de estos resultados. Durante el año 2010 la actividad económica continuó mostrando un importante dinamismo, con un crecimiento real del Producto Bruto Interno (PIB) de 8,5%. De esa forma, se continuó consolidando un proceso de crecimiento muy vigoroso en el que el nivel de actividad se expandió por séptimo año consecutivo a un ritmo promedio de 6,2% anual, muy por encima del promedio histórico (cercano al 2%).
La economía uruguaya había sufrido en 2009 una importante desaceleración a causa de los impactos de la crisis internacional, si bien su desempeño fue bueno en comparación con otros países, evitando caer en recesión, siendo Uruguay uno de los 5 países en el mudo que crecieron a pesar de dichas circunstancias. En 2010 la economía retomó una senda de mayor dinamismo, que alcanzó a todos los componentes de la demanda. El gasto de consumo final creció 10,1% en términos reales, en tanto la inversión se expandió 14,4% y las exportaciones 9,1%.
La política fiscal fue continuación de la exitosa seguida desde el presupuesto anterior con el propósito de contribuir a desarrollar las condiciones necesarias para el crecimiento sostenido y sustentable de la economía y la reducción sustancial de las desigualdades sociales.
En general todos los datos de lo acontecido en el año pasado son buenos y superan las previsiones oficiales. El nivel de actividad creció en todos sus componentes por encima de lo esperado (sobre todo en la formación bruta de capital), al igual que la ocupación (la ocupación creció un 2,1% y el desempleo bajó al 6,7%). Los salarios reales crecieron significativamente y el IPC estuvo dentro de los rangos esperados y la valoración de nuestra moneda respecto del dólar fue superior a lo esperado.
El resultado fiscal (déficit) sobre PBI -1,1% fue algo mejor a lo esperado -1,2%, pese a que en el ejercicio se computó como gasto la creación del Fondo de Estabilidad Energética por U$S 150 millones (en caso de no haberse computado, el déficit de 1,1% del PBI se hubiera reducido a la mitad). Ese mejor resultado se explica fundamentalmente por una mejora en el resultado global del Gobierno y BPS.
La ejecución total de gastos fue en términos reales un 3% superior al 2009 con incrementos significativos en Vivienda: 40%, Salud Pública: 13%, ASSE: 10%, e Interior: 8%; mientras que los intereses de la deuda se contrajeron en 6%.
En educación , los créditos presupuestales 2010 a valores constantes casi se duplican (90% y más) en relación a los de 2004 y para 2014 el incremento proyectado es del 30% más; con lo que en definitiva la inversión del país por alumno, en valores constantes de 2011, y a partir de un valor 100 en 2005, llegó hoy al valor 212 (más que se duplicó), luego de 20 años de otros gobiernos (de los que se nos dice que somos continuidad) que tan solo promediaron 90 (en el año 1985 destinaron 67).
En salud en términos constantes el gasto por inversiones se multiplicó por 4 y en remuneraciones por usuario 3,5. Por todo ello el gasto total por usuario de ASSE en términos reales más que se duplicó durante nuestro gobierno progresista. Las asignaciones presupuestales previstas 2010-2014 implican un crecimiento adicional del 20% para la implementación de diversos planes y proyectos.
Las transferencias monetarias se focalizaron en hogares de menores recursos, entre duplicando y casi triplicando los beneficios sociales y transferencias promedio per cápita entre los años 2004-2010 de los 4 primeros deciles en relación al promedio país. Con el fortalecimiento de programas del Plan de Equidad, para su continuidad, ampliación y mejora, se refuerza con recursos entre otros para: Tarjeta Alimentaria que duplica su asignación en este 2011 y alcanzará en 2012 a 30.000 hogares con $1.100 millones; y las Asignaciones Familiares para hogares en situación de vulnerabilidad socioeconómica que ya a Diciembre 2010 cubría aprox. 412.000 niños y adolescentes.
También cabe mencionar los indicadores coincidentes de la tendencia de mejoras cuanti y cualitativas en el mercado laboral, con un crecimiento del empleo de más de 10 puntos, baja del desempleo a menos de la mitad (de más del 13% al 6% pese a la crisis internacional) y mejoras en la formalización (casi 250 mil más puestos cotizantes a la Seg.Social), que pautan records históricos; y las mayores variaciones de incrementos (2004-2010) de ingresos laborales reales de hogares de los deciles de estratos medios hasta (51%) en más del 15% sobre la media país (44%), con disminuciones en la brecha de las diferencias salariales por nivel educativo en base a las políticas de empleo impulsadas por el gobierno progresista de suba de salario mínimo y de las categorías salariales más bajas. Y esa política deliberada de incrementos diferenciales se repite en las pasividades mínimas que tuvieron 136% real de aumento en un promedio país del 32% sobre el índice de diciembre 2004, con mayor impacto en los 3 primeros deciles donde contribuyen a mejorar ingreso de los hogares en el doble que el promedio país.
En conclusión la política Económica del Frente Amplio tuvo y tiene como condición las políticas sociales y no a la inversa como en el pasado. Sin duda esta nueva concepción nos ha permitido alcanzar los logros antes detallados y en el futuro seguiremos por este rumbo, gobernando con los pies en la tierra con una actitud responsable y visión crítica de nosotros mismos, sin perder de vista la utopía.
Alfredo Asti - Diputado Asamblea Uruguay (Frente Amplio)
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