El Congreso de la Federación Rural y sus prioridades
Gustavo Guarino
02.05.2014
El próximo 10 y 11 de mayo se realizará en San José el Congreso anual de la Federación Rural; los temas anunciados son: la Minería , el encarecimiento de costo y situación económica de la empresa ganadera. Sin duda temas importes para el sector, pero no muy diferentes a los que tradicionalmente tratan.
Pensamos que si hoy existe un tema que debería ser el central y sobre el que habría que salir movilizados y con acciones definidas para modificar la realidad, ese es el del precio de las haciendas y el manejo del mismo por parte del oligopolio de la Industria Frigorífica. Claro, el tema es complicado y exige acuerdos previos dentro del propio sector productor.
En un reciente trabajo de Jorge Chouy editado en la revista agropecuaria del diario El País( 30 de abril 2014), nos habla de que de seguir la actual situación de precios , en caso de que no empeore, cuando termine el primer semestre del 2014 el valor recaudado por venta de haciendas será de 232 millones de dólares menor que a igual período del año anterior (22% menos). Si anualizamos lo anterior, partiendo de los mismos supuestos, tendríamos que al finalizar el 2014 los productores percibirían casi 500 millones de dólares menos; eso sería producto de una menor faena y la mayor parte producto de la diferencia de precio, es decir, la Industria se estaría apropiando de alrededor de 288 millones de dólares que antes iban al bolsillo del productor. Téngase en cuenta que el precio internacional de la carne sigue con los mismos valores y con perspectivas de estabilidad y mejora. Lo que importa acá es la magnitud del fenómeno; recordemos que, cuando el Dr. Tabaré Vázquez habló de que si ganaba cumpliría el programa del FA reimplantando el impuesto de primaria a los predios rurales, alguna gente puso el grito en el cielo, pronosticando catástrofe para el campo. Considérese que las estimaciones de lo que pagaría todo el campo (no sólo la ganadería) por dicho impuesto es del orden de los 20 millones de dólares; compárelo con los 288 millones que es probable que en el 2014 se queden en el bolsillo de media docena de industriales de la carne. Esto obliga a que se encaren algunos temas, los que por razones ideológicas les es difícil hacerlo a los tradicionales dirigentes rurales; uno de ellos es el de la intervención del Estado, para regular, para impedir que se siga utilizando el seguro de paro en la especulación de algunas plantas, la posible prohibición de que los industriales también tengan corrales de engorde, la realización de negocios de gobierno a gobierno con façon directa de los productores en alguna planta, o un tema al que todos le temen, el de la creación de un Frigorífico Nacional. La derecha le teme por lo que significaría la presencia del Estado en uno de los temas estratégicos del país, como lo es la industrialización y comercialización de la carne. Para eso recurren a la historia del viejo FRIGONAL, o la de otros emprendimientos de productores como INFRINSA o el PUL, y lo hacen llenos de prejuicios sin animarse siquiera a estudiar realmente que pasó en esos emprendimientos y cuan distinta es hoy la realidad del país y del negocio mundial de la carne. En la izquierda también estamos llenos de prejuicios y esquivamos el bulto. Mientras no se hable claramente de este tema, no podemos pensar en ser soberanos en un sector tan importante como la carne. No estoy diciendo que haya que crear un Frigorífico a imagen y semejanza del que ya tuvimos, tampoco que necesariamente haya que crear un frigorífico, pero sí que debemos estudiar el tema en profundidad. Con exhortos de buena voluntad será muy difícil que los empresarios de la carne repartan el botín pacíficamente, como dicen los abogados.
Gustavo Guarino
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias