Rusia: severa advertencia de escalada nuclear

Ismael Blanco

03.12.2024

"Creo que no nos quedamos ciegos, creo que estamos ciegos, ciegos que ven, ciegos que, viendo, no ven". José Saramago. Ensayo sobre la Ceguera.

¡Occidente está ciego!, como lo narra magistralmente el Nobel escritor portugués, Occidente en su conjunto padece de una ceguera "selectiva", creando un escenario utópico que dista en mucho de la realidad, en el cual y en forma autocomplaciente, se siente "victorioso".

Inmerso en esa ficción, desde Washington, pretenden convencer al mundo de su poderío hegemónico - apelando con tal propósito a un discurso falaz, impuesto, direccionado y difundido a gran escala, en los medios de comunicación que les son pertinentes y en redes sociales, creando de esta forma, en el de los países cuyo dominio imponen, un "consenso artificial" que los avale y de esta forma, logran  financiar una guerra  bajo la falsa premisa de "agredidos".

¡La realidad es muy diferente!

A esta altura de los acontecimientos, ni el más distraído,  puede desconocer que EEUU es una potencia desgastada y gestionada por malos administradores, que  ha mantenido intacto su  desmesurado  afán colonizador  para expandir su dominación territorial, apelando a lo largo de toda su historia a la  articulación y financiamiento  de centenares de  guerras interminables. A título referencial, por citar solo algunas, tenemos  desde la Guerra Fría en adelante: la guerra de Corea;  la guerra de Vietnam; la guerra del Golfo;  la Guerra de Kosovo; la guerra Afganistán y la actual guerra que propicia contra Rusia en forma conjunta con sus aliados, la OTAN y la UNION EUROPEA ,en territorio de Ucrania y Rusia.  Ejemplos sobran.

Todas estas escaladas las llevó a cabo bajo diversas formas, incluso bajo la modalidad de "ayuda humanitaria," pero siempre en respaldo de sus propios intereses y como forma de autofinanciamiento de la industria armamentística, sentando de esta forma la base de su poderío hegemónico en el más amplio alcance.   

En este contexto se enmarca la escalada de Biden y sus aliados que no dudan en conducir al Mundo a un corredor sin salida, a una guerra global total de exterminio.  Con tal propósito, el 20 de noviembre del corriente, autorizó el uso de misiles balísticos Atacms estadounidenses, contra objetivos en territorios de Rusia; con el agravante, además, que nadie duda, y menos quienes sufren las consecuencias de estas  armas, que sólo pueden ser utilizada por idóneos de la OTAN y en particular operadores de EEUU.

Me pregunto: ¿Es qué acaso, además de ciegos, estamos sordos? ¿No somos capaces de escuchar a Rusia y los fundamentos de su lucha? ¿Alguien en su sano juicio puede pensar que Rusia está dispuesta a sucumbir en esta guerra sin cuartel que le plantaron? ¿No sería más lógico analizar y concluir que si Occidente persiste con su propósito de hegemonía despótica y endemoniada pagaremos todos el precio con nuestras propias vidas?

 La gravedad del actual escenario bélico, en su real dimensión pocos parecen advertirlo, lo que califico de "situación crítica".  No hay cabida para elucubraciones ni más engaños;  dado que sostener teorías peregrinas de una victoria de la OTAN, es una postura autocomplaciente y  sin ningún respaldo en la realidad.

Persistir neciamente en la arremetida, en la ridícula e infundada creencia de que "Rusia no hará nada"; "que Rusia no desplegará el uso de su poderío armamentístico nuclear", es un engañó al que pretenden arrastrar a la humanidad, sin que lo note.

 Si lo que Norteamérica y Occidente pretenden es "arrinconar a Rusia," ¡malas noticias!, Rusia no defiende sus intereses económicos, sino  algo superior como lo es su propia existencia, y lo hace en medio de esta guerra montada para desbastarla. En consecuencia, obligada por las circunstancias, por los constantes ataques, desplegará todo su poderío armamentístico nuclear para defender su existencia. No dudará en hacerlo a pesar de que Occidente siga sin creerlo. ¡Ya lo advirtió!

Desplegará la "estrategia MAD", ( protocolo de uso de las armas nucleares) -tan cuidadosa y prudentemente preservada hasta el momento, por la conciencia de que las consecuencias de su utilización son irreversibles para la humanidad.

Ahora bien, ante los embates nucleares por parte de EEUU y Gran Bretaña contra su propio territorio - los cuales han traspasado todas las líneas Rojas - obligados por las circunstancias, ¡lo harán!  

Rusia está preparando meticulosamente su defensa: Vladimir Putin aprobó una doctrina nuclear renovada, la cual implica la posibilidad de atacar a cualquier país que lo ataque en forma nuclear. El escenario es muy delicado; se hicieron demostraciones; se lanzaron en la ciudad de Dnipro y en Kiev, misiles convencionales de alcance medio (nombre clave Oreshnik), uno de los últimos sistemas de misiles rusos. En este caso, y dado que se trató de una advertencia, en la versión no nuclear hipersónica de un misil balístico. Queda a la vista el poderío nuclear ruso; no es solo una amenaza.

 Se alzan voceros del Kremlin que advierten "no lleguemos a estos extremos". No obstante, si fracasan las advertencias; ¡si lo que Occidente quiere es una real  guerra de exterminio de la humanidad  inevitablemente se tendrá. Rusia nunca claudicará en la defensa del país y de sus compatriotas. La historia habla con los hechos. ¡Rusia es paciente, pero implacable a la vez!. No sería ésta la primera vez que se debe acudir a soluciones extremas, la Gran Guerra Patria así lo demostró sepultando al ejército nazi en 1945.

 ¡La impunidad y las provocaciones no son buenas tácticas! en su constante desafío a Rusia, colocan al mundo en un nuevo  escenario de "guerra global total", sin precedentes históricos que permitan  referenciarlo; Occidente, la UE y la  OTAN actúan en el filo de navaja, sin límites y sin asumir el fracaso rotundo de sus dos principales objetivos estratégicos, con los  que  iniciaron la guerra no declarada: lograr aislar a Rusia de la escena internacional y al mismo tiempo, derrocar el liderazgo político de Vladimir Putin.

Los hechos son contundentes: el pueblo ruso está más unido que nunca y  convalidó a su presidente en forma masiva en elecciones presidenciales, no obligatorias, a las que concurrieron voluntariamente a las urnas más del 90% de los rusos a ratificarlo. Al mismo tiempo, a nivel internacional, lejos de aislar a Rusia, consolidaron su economía; las sanciones impuestas por Europa tuvieron un efecto boomerang, impactando negativamente en sus propias economías internas.  Rusia se consolida como potencia mundial, en una nueva fase histórica, a tal punto que, en plena guerra, su crecimiento económico la coloca como la 4ta. economía global desplazando a Japón al 5to. lugar. En paralelo, ha delineado el trazado de un nuevo concepto amplio y omnicomprensivo de la Multilateralidad en el vínculo con otros Estados.  

Aumentó el desarrollo de su potencial armamentístico; consolidó tratados de ayuda reciproca con países amigos,  ampliando  su zona de influencia  hacia países de Asia, África y América Latina;  abrió  nuevos mercados comerciales de expansión través de los BRICS,  con beneficios recíprocos para los Estados del Sur Global, proyectando de esta forma su influencia multidireccional a nivel internacional, en la que Europa quedó excluida. ¿Quien es entonces el gran perdedor?

A esto, se suma el rotundo fracaso de los propósitos de la OTAN en el terreno bélico. ¡están perdiendo la guerra! Y lo saben. Esto no es propaganda.

Fallaron claramente todas las políticas direccionadas impulsadas desde las élites de Washington y Bruselas, que movieron piezas en el tablero geopolítico  como articuladores de esta ofensiva.

El resultado de estas estrategias de Occidente fue calamitoso y condujo al aniquilamiento personal de Biden, en el escenario político, del que fue vergonzosa y doblemente desplazado:  primero,  de sus aspiraciones a ser presidenciable,  de lo cual debió desistir dado que lo corrieron mediante un "golpe blando" interno,   obligándolo a renunciar a su candidatura. El golpe de gracia lo recibió posteriormente con el avasallante  resultado de los comicios electorales en los que el Republicano Donald Trump, desembarcó como nuevo Mandatario electo, mostrando como promesa de campaña negociar el final de la guerra en defensa de los interéses de EEUU, partiendo de la base que la guerra de la OTAN ha sido el negocio de la familia Biden. De todas formas, veremos que acontece... Lo que sí estoy convencido, es que solo Rusia es capaz de salvarse a sí misma,  desde la derrota a Napoleón, el triunfo de la Revolución Bolchevique y la victoria en la Gran Guerra Patria contra los nazis y fascistas, esto fue así.

La derrota electoral de Biden y su partido Demócrata, dispuesto a todo y al servicio de la OTAN , no dudó en  apelar al empobrecimiento de su propio pueblo-, aprobando ayudas siderales a Ucrania, haciendo pagar  a los ciudadanos norteamericanos el alto precio de esta guerra sin sentido; articulada en aras de intereses pertinentes a la OTAN, las empresas armamentísticas y los suyos personales.

En este sentido, me refiero a los negocios empresariales de corrupción montados en Europa y Asia  por su hijo Hunter Biden, en su gerenciamiento de la empresa ucraniana Burisma,   y su dudosa contratación gerencial por la cual esta siendo  investigado por la justicia a la luz de siderales deudas fiscales tal como lo publicó el periódico  The New York Times. Al día de hoy, mientars escribo este artículo, me informo que fue indultado por su propio padre generando una afrenta al Poder Judicial de los EEUU, que se jacta de ser un paradigma de la justicia y la democracia.

¡La guerra declarada a Rusia tiene claros propósitos!

 El daño no se termina, y a días de cesar en su mandato, sabedor de la postura antibelicista de su sucesor presidencial, nuevamente arremete autorizando impunemente el uso de misiles de largo alcance contra Rusia.

Occidente colectivo fue "arrastrado" a la guerra a través de mecanismos híbridos y un discurso falaz que presenta a Rusia "como agresor".  Esta estrategia se desarrolló con el beneplácito del Eje de países de la Unión Europea - principalmente Gran Bretaña, Alemania y Francia -, que no dudaron en llevar a cabo esta guerra despiadada, en su propio continente, con el claro y único propósito de borrar a Rusia como potencia mundial de la faz de la Tierra, sin importar las consecuencias.  

Es claro que la "irreverente Rusia" y su postura imperturbable les incomoda y por esta razón, la paz es un escenario que no le interesa a  Occidente.   

En la puja por poder y dominio territorial y hegemónico están dispuestos a financiar una guerra inescrupulosa; que sus propios ciudadanos participen del combate; que sus propias economías se fragmenten, soportando los pueblos las penosas consecuencias en post de veleidades de los mandatarios que confabulan en la Unión Europea,  aliados en una causa común.    

A pesar de los esfuerzos geopolíticos desmedidos y de las estrategias diseñadas por Occidente los resultados del conflicto bélico tanto en territorio ucraniano como en suelo ruso, en Kursk, fracasaron uno tras otro y son claramente favorables a Rusia, que avanza a paso firme y libera regiones día a día. Ucrania ya perdió la guerra, basta la siempre apreciación visual de sus dimensiones territoriales antes y después de haberle desatado este infame conflicto a Rusia.

Paradójicamente, la OTAN y sus aliados aumentan la escalada, conscientes de sus embates fallidos. No buscan la paz, no les interesa ahora ni les ha interesado nunca, porque Ucrania es la excusa para combatir a Rusia, cuyo objetivo no es conquistar territorio, sino poner fin a la expansión de la OTAN, que plantó amenazantes misiles en su fronteras, que propició la aniquilación en un embate nazi fascista contra población rusa en el Dombas, a partir del Maidan del 2014, que exterminó a sus compatriotas despiadadamente y que hará lo necesario para lograr su rusofobo propósito.  

Rusia nunca se opuso al diálogo para alcanzar la paz, no buscó ni quiso esta guerra, por el contrario,  recordemos que a poco de iniciado el conflicto, en el año 2022, se iniciaron los acuerdos para negociar la paz en Estambul, ahora bien, cuando se había arribado a términos que implicaban la no adhesión a la OTAN de Ucrania, el 9 de abril de 2022, el entonces primer Ministro Británico Boris Johnson viajó a Kiev para impedir el acuerdo  de paz bajo la excusa de los "asesinatos de Bucha", operación ésta,  que  como posteriormente se supo fue producto de un montaje artificial, para mostrarle al mundo un motivo falso de "depredación" rusa en suelo ucraniano.

Fue una clara excusa. Ni la OTAN ni la EE. UU., ¡querían la paz! Esta paz no era conveniente porque el poderío de Rusia permanecía intacto, su objetivo no se cumplía, entonces, entre el entramado conspirativo para abortar las negociaciones Boris Johnson fue portador de dos mensajes rotundos: el primero, que Putin "es un criminal de guerra" con el que no hay que negociar, el segundo, que aunque Ucrania estuviera dispuesta a negociar acuerdos de garantías con Putin, el Reino Unido se oponía!

 imitri  Trenin, Director del Canegie Moscow Center y Presidente del Consejo de Investigación del Programa de Política Exterior y Seguridad de Rusia, en recientes declaraciones  contundentemente expresó: "No hay nada completamente inevitable en la historia, salvo que todo ser humano es mortal. Las fuerzas enfrentadas tienen la oportunidad de detenerse, de negociar. En una situación dada entre Rusia y Occidente, hay que darse cuenta de que lo que está en juego para cada parte. Para los Estados Unidos, se trata de su prestigio, sus ambiciones globales y sus relaciones con sus aliados. Para Rusia está en juego la existencia del propio Estado. Permítanme recordarles las palabras de Putin en una entrevista anterior con la Televisión Estadounidense:  "Para que necesitamos la paz si Rusia dejara de Existir?.. añadiendo "Personalmente me lo tomo en serio".

¡La Paz es el camino deseado! ¡Por el bien de la Humanidad, ¡Escuchemos de una vez por todas las advertencias de Rusia!

 

Ismael Blanco
2024-12-03T20:46:00

Dr. Ismael Blanco