El puerto de aguas profundas en la costa de Rocha no es un puerto solo para Uruguay, es para el Mercosur
Jaime Igorra
10.12.2021
En la década de 1990, tiempo en el cual se realizaba el proceso de creación del MERCOSUR y seguramente por el ideario de integración que esto supuso y posiblemente por su directa influencia, se habló de la necesidad de un puerto común de aguas profundas, fuera del estuario platense, en aguas oceánicas, en el que pudieran operar tanto a los países limítrofes a Uruguay, Argentina y Brasil, como para Bolivia y Paraguay carentes de costas marítimas no fluviales.
Desde el comienzo de estas conversaciones se hace referencia a la costa atlántica de Rocha, que a poca distancia de la costa tiene profundidades apropiadas, como el espacio posible para la propuesta.
Las posibles alianzas comerciales del MERCOSUR con otras y variadas alianzas de naciones y sus necesidades comerciales como la Comunidad Económica Europea, o países económicamente poderosos, facilitarían la realización de esta importante obra portuaria.
Uruguay por sí mismo tendría grandes impedimentos económicos para realizarla.
Para las naciones del Atlántico Sur, ya no se discute la ubicación de la costa de Rocha en el Uruguay, sino el punto preciso de su ubicación y su financiación por aquellos países o comunidades económicas directamente favorecidos, cuya proporcionalidad no es fácil de calcular por la variedad de incidencias técnicas y diplomáticas, difícil pero no imposible.
El puerto de aguas profundas es un factor incidente a escala del ordenamiento territorial nacional y regional, tan importante como lo fueron al principio del siglo XX los puertos de Buenos Aires (Argentina), Montevideo (Uruguay), Santos (Brasil), a nivel nacional, río platense y regional.
Países lejanos de muy poderosa economía como China ya operan con fuerte presencia en puertos como Buenos Aires o Santos, pero no escapa a sus intereses comerciales e industriales la importancia de un puerto de aguas profundas en la desembocadura atlántica de las Hidrovías de los ríos Paraguay, Paraná y Uruguay. No me extrañaría una futura negociación entre la empresa Belga Katon Natie y China por el manejo del puerto de Montevideo.
Lo que si cuenta y mucho para el interés de un puerto de aguas profundas en la costa de Rocha es la operación de los super porta contenedores que llevan 10.000 contenedores con una gran eslora y calado superior a los 15 mts.
Su construcción sería una exigencia del futuro para las líneas marítimas oceánicas , siendo su centro ordenador de interés el territorio costero uruguayo, lo cual demandaría una especial atención estatal, tecnológica, económica y de apertura diplomática, ya que esta obra superaría las posibilidades de nuestro país. Por lo tanto esta realización debería seguir teniendo la importancia que en los años 90 se pensó como fundamental para el MERCOSUR y si no es así otro vendrá que mejor lo hará. La razón final la dará la Historia.
De momento, para las proximidades al puerto de aguas profundas en Rocha, se proyecta un pequeño puerto en el Arroyo Tacuarí que desemboca en la Laguna Merim a lo que se sumaría un canal con esclusas para unir esta laguna con la Laguna de los Patos (Brasil), y que sería esta vía fluvial utilizada por chatas transportando producción agrícola de interés para Uruguay y Brasil. Esta obra es posible. Ya desde fines del siglo XIX se proponía la unión y navegación de estas dos grandes lagunas.
Jaime Igorra