Cambios en la cúpula del gobierno ruso

Jorge Jouroff

20.05.2024

En su discurso el día de la victoria contra el nazismo, Putin dejó claro que "Rusia hará todo lo posible para evitar un enfrentamiento global, pero al mismo tiempo no permitiremos que nadie nos amenace." Y continuó: "nuestras fuerzas estratégicas (nucleares) están siempre alerta".

Poco después, se anunciaron una serie de cambios en el elenco del gobierno ruso, siendo particularmente importante la designación del nuevo Ministro de Defensa, Andréi Beloúsov, quien reemplaza al General Serguéi Shoigú.

 

Cambios en la cúpula rusa

Luego del desfile el día de la victoria contra el nazismo, donde deja claro una vez más la determinación de continuar la guerra por todos los medios hasta lograr determinados logros, a mediados de este mes Putin anunció una serie de cambios en el gabinete. Entre ellos, el cambio del actual Ministro de Defensa ruso,  General Serguéi Shoigú, quien pasa a ser  secretario del Consejo de Seguridad,  por Andréi Beloúsov, un economista de sesenta y cinco años que ya ha ocupado lugares relevantes dentro del gobierno. También nombró nuevos ministros en Industria y Comercio, Transportes, Energía, Agricultura y Deportes. El resto de los ministerios (Primer Viceministro, Relaciones Exteriores, Finanzas, Desarrollo Económico, Recursos Naturales, Cultura, etc.) mantienen sus cargos.

Resulta evidente que se continúa con la línea económica y las relaciones exteriores, y que los cambios afectan sobre todo al área de defensa y seguridad e industria. La razón quizás haya que buscarla no en problemas propiamente militares o de seguridad, sino en las lecciones aprendidas en la guerra de Ucrania en cuanto al tipo de guerra que se libra y a la relación entre industria y defensa, y, también,  a las previsiones de nuevos conflictos.

 

El área de defensa y seguridad

Un indicio es que no toda el área se modificó. En efecto, mantienen sus cargos el Ministro del Interior, el Ministro de Defensa civil y emergencias, el Ministro de Justicia, el Director del Servicio Federal de Tropas de la Guardia Nacional, el Director del Servicio Federal de Protección y el Jefe de la Dirección Principal de Programas Especiales del Presidente. También, y muy importante, los dos directores de los servicios de inteligencia más importantes del estado ruso: el Director de Inteligencia Exterior (SVR), Serguéi Naryshkin y el Director del Servicio Federal de Seguridad (FSB),  Alexánder Bórtnikov. Estos dos últimos son los sucesores del los directorados exterior e interior del antiguo KGB, órgano rector de la inteligencia soviética.

 

El nuevo Ministro

Andréi Beloúsov, el nuevo ministro, estuvo vinculado en un principio al área tecnológica, pasando luego al área de planificación. Entre 1981 y 1986 fue becario de investigación e investigador en el Laboratorio de Modelización de Sistemas Hombre-Máquina del Instituto Central de Economía y Matemáticas de la Academia de Ciencias de la URSS.  En 2012 fue designado ministro de desarrollo económico y asistente presidencial, para, en enero del 2020  pasar a desempeñarse como primer vicepresidente del gobierno. Son relevantes las declaraciones de Peskov, quien explica que la designación de un civil se efectúa por "la necesidad de adecuar el sector de defensa a la economía del país", dejando claro que, por su trayectoria, "no es un civil cualquiera" sino que, por sus antecedentes vinculados a la gestión y la planificación económica, "está abierto a la innovación y a la introducción de todas las ideas avanzadas", lo que demuestra que la intención es no sólo la producción de armamento en su relación con la economía, sino también la producción de nuevos tipos de armas para un nuevo tipo de guerra.  El énfasis puesto tanto en la innovación, parte de fundamental de la carrera del nuevo ministro, como en la planificación, sugieren la idea que lo importante no es sólo la mayor producción, sino también la relación entre la industria y las necesidades bélicas, tanto en cantidad y cantidad como en innovación.

En el mismo sentido, Peskov, justificó la designación de Belóúsov por "la necesidad de adecuar el sector de la defensa a la economía del país", explicitando además que "hoy en día, en el campo de batalla, gana el que está más abierto a la innovación, más abierto a su incorporación más rápida. Por lo tanto, es natural que en la etapa actual el presidente haya decidido que un civil dirija el Ministerio de Defensa". Belousov es, además, un defensor de la idea de la soberanía tecnológica de Rusia y fue bajo su dirección que se elaboró el concepto de desarrollo tecnológico hasta 2030, según el cual Rusia debería aprender a producir chips, máquinas de alta precisión, dispositivos médicos y software, aviones y drones, así como sistemas de armamento poniendo 2030 como límite.

 

Lecciones de Ucrania

En el plano militar, Ucrania se ha convertido no sólo en un campo de batalla a una escala como no se veía desde la segunda guerra mundial, sino también en un campo de prueba de nuevas armas y tácticas operativas que implican distintos conceptos. En particular, la guerra mosaico y  multidominio, con el desarrollo de nuevas tecnologías aplicadas a fines operativos, que, por ende, también modifican las tácticas y la forma de combatir. Es hacia mediados de 1980 que nace el concepto de Revolución en Asuntos Militares (RAM o MRA por sus siglas en inglés), cuando la Unión Soviética comienza a ver el rezago frente a los Estados Unidos en cuanto a la aplicación de la ciencia y la tecnología en asuntos militares, un concepto que también comprende la relación entre la organización, la táctica y la operatividad  con la aparición de nuevas tecnologías, particularmente en el campo de la computación, los centros de comando, control y comunicaciones, la tecnología satelital, etc. , que proporcionan la superioridad en el campo de batalla. Posteriormente, cuando el debate se generaliza, los norteamericanos desarrollan el concepto Air Land Battle 2000, relativo a la utilización de de los nuevos armamentos, pero concentrados en un punto, para lograr la superioridad sobre el adversario, concepto que evoluciona hasta nuestros días con la guerra multidominio y multimosaico. El concepto multidominio fue adoptado primero por el Ejército de Estados Unidos hacia 2016, y se denominó de esta forma porque en este tipo de guerra intervienen de manera conjunta los seis dominios de la guerra contemporánea: tierra mar aire, espacio, electro magnético y cibernético, y donde se piensa que será muy difícil tener la superioridad en todos ellos. Como resulta claro, es el proceso de cambios tecnológicos que obliga a cambios en los conceptos teóricos, doctrinarios y operativos, desatando un proceso de innovaciones que pudieran plasmarse en manuales operativos y dieran efectividad. Es así que la agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa de Estados Unidos (DARPA) propone el término guerra de mosaico, que implica "bloques" flexibles y más baratos de sistemas de armas para usarlos en red y concentrados en un punto, en múltiples escalas de intensidad de un conflicto aplicados a cualquier tipo de escenario, hasta en los más difusos que denominan de "zona gris", donde las partes ("bloques") actúan tanto juntos como concentrados, con gran flexibilidad, con el fin de neutralizar un adversario, utilizando armamentos y sensores de bajo costo, pero muy efectivos por la forma de la utilización. La aplicación de estos conceptos por las fuerzas armadas de los distintos países, en particular los más poderosos, está en pleno desarrollo hoy día, y, como se ve, implica toda un revolución tanto en la forma de hacer la guerra y en su relación con la organización, la doctrina y las formas operativas, como con la de éstas con la industria y la innovación.

La designación del nuevo ministro parece indicar entonces la asimilación de estas lecciones y la preparación para el nuevo tipo de guerra, donde la aplicación de la tecnología exija diversos tipos de armas para otro tipo de guerras.

 

Jorge Jouroff
2024-05-20T11:09:00

Jorge Jouroff