El mercado de la distracción

Magela Misurraco

25.10.2023

El juego se llamaba "El teléfono descompuesto”. Los jugadores partían de una frase original y la iban susurrando al oído a los demás hasta que llegaba al último jugador convertida en una oración totalmente distinta.

 

Si la frase de partida del juego era "mi abuela compró un biombo", la definitiva podía quedar en "Adela viajó al Congo".

En el "Teléfono descompuesto, Era analógica, los escuchas fueron alterando el sentido -según cómo oían- y el resultado fue fonéticamente similar, pero semánticamente distinto.

Una metáfora del mundo actual en el que la comunicación entre, apenas, dos individuos puede ser un teléfono descompuesto por el exceso de estímulos que los rodean y les impide enfocar la atención.

Le preguntaron al dueño de Neftlix si su principal competidor era Amazon y respondió "no, el sueño". 

El desafío no es superar al otro en atributos, mejorar la ventaja comparativa, el valor diferencial, sino mantener al mayor número posible de abonados conectado durante más horas.

Ya no existe el fin de la programación, la "señal de ajuste". Nada que ponga un límite a lo que haya para distraerse y estar frente a una pantalla más que caer vencido por el sueño. El scroll es infinito.

Las marcas no sólo tienen otras marcas competidoras para posicionar productos y servicios en el mercado, sino factores que compiten: el sueño, la alimentación, el clima, el huso horario, el ocio; la soledad. 

Las corporaciones luchan contra reacciones fisiológicas. Manipulan con los miedos, la impaciencia, la frustración, las pulsiones de vida y muerte, por citar algunos ejemplos.

Las motivaciones humanas giran en torno a tres o cuatro temas universales, globales. Puestos en un orden de prioridad por la agenda de un puñado de magnates. 

Gente fácil de persuadir

Al individuo de la Era digital es muy fácil distraerlo, sugestionarlo, atemorizarlo, también estafarlo y guiar su conducta hacia donde convenga.

Le otorga crédito absoluto y criterio de verdad a todo lo que aparece publicado en Internet. Si lo "dice" la web y está en la Wikipedia es cierto. Punto. No hay más fuentes que chequear.

Ahí aparecen frases imposibles atribuidas a Jorge Luis Borges, Einstein; Oscar Wilde o Herman Hesse. Es palabra de Internet.

William James, uno de los psicólogos más eminentes en la historia de la disciplina, definió a la atención como la facultad mental más importante. Sin fijar la atención  no se pueden realizar actividades conscientes vitales. 

Hay estudios que están revelando que enfermedades como el Alzheimer, y otras que afectan a las funciones cognitivas, se pueden prevenir si se entrena al cerebro como a los músculos. El propio ejercicio físico actúa a favor de funciones congnitivas como la atención y la memoria.

La mínima conversación requiere cierto sostén de la atención para procesar la información del discurso del otro, hilvanar las palabras y componer un sentido. Esa operación es imposible de hacer si sólo se captan palabras sueltas.

¿Cuántas veces el hablante es interrumpido por las miradas del otro a su teléfono celular, a lo que sucede alrededor, a lo que está diciendo otro hablante y el "biombo" del que uno habla se transforma en el "Congo" que su barullo mental captó y hay que reiterar la misma simple frase y hasta explicarla?

Con frecuencia no hacen falta estímulos externos. 

En la conversación cara a cara las personas no pueden sostener la atención y se pierden tramos de lo que está diciendo el otro.

Si no aparece el beneficio de la recompensa emocional enseguida, la atención queda fuera de foco, como en una fotografía que se hace con descuido y en movimiento.

Los ciudadanos digitales se muestran incapaces de construir sentido y significación hasta en un texto breve porque no lo pasan por el filtro del pensamiento. Se anticipan a responder antes que a entender. "-¿De qué Adela me hablás?". Todo lo que supone procesamiento intelectual se descarta.

Millones de niños asisten a la escuela medicados con un famoso fármaco porque están diagnosticados con Trastorno de Déficit Atencional, sin haber pasado por más estudios que "el ojo clínico" de la maestra.

El intercambio de textos o el chat es otro teléfono descompuesto porque no se lee. Ese diálogo entrecomillas es dos monólogos. En varios tramos aparece un signo de pregunta o el esmoji con la expresión de pensativo, o confuso, antes de releer el texto que no se entendió y lo que sucedió es que no se leyó o se vio sin intervención de la atención.

La atención dirigida se origina en la corteza prefrontal del cerebro y permite un enfoque prolongado de todas las funciones cognitivas que intervienen en el proceso de enfocar la atención hacia un solo estímulo.

La dopamina digital

Todos los fenómenos sociales y comportamentales tienen sus causas.

La gran protagonista de lo que está ocurriendo en la sociedad de la distracción es la dopamina. Se trata del neurotransmisor más importante del Sistema Nervioso Central que participa en diversas funciones del organismo, tales como la conducta motora, la capacidad de comunicación, así como las vinculadas a las emociones y a las respuestas de orden afectivo.

La dopamina, además de un neurotransmisor, es la hormona de la satisfacción y la recompensa. Se libera dopamina cuando una selfie en Instagram tiene muchos likes.

La recompensa que antes exigía un esfuerzo y un tiempo de espera, hoy es instantánea. El conjunto de "me gusta", "me encanta", "me importa" que se logra con una publicación en Facebook produce descargas de dopamina, como puede producir la comida rápida, un postre, o una droga.

Es fácil volverse adicto a la aprobación de los demás y frustrarse por las escasas visualizaciones y corazones rojos que obtuvo una acción en Tik Tok. Se crea otra y otra, sin descanso, hasta que una publicación lo va a lograr. Hay una sobreexigencia hacia cuestiones banales de la vida y una veneración de lo intrascendente. Lo que "causó furor  en las redes", "se viralizó" o "fue trending topic" puede ser un hecho muy frívolo, pueril y que no incide en la vida cotidiana, como que se haya visto un cerdo pequeño en Avenida Italia. Sí, es fuera de lugar ver a un animal de éstos en plena ciudad, pero ¿que acapare la atención y la conversación pública?.

A un click y sin moverte de tu casa

No moverse es la promesa de beneficio de  muchas marcas. Como la instantaneidad del "ya" y el encontrar pareja en el catálogo de las aplicaciones de citas. 

Por su parte, el algoritmo nos guía hacia el único universo de nuestros intereses.  Conoce qué consumimos, a qué horas, qué temas nos importan, cuáles son nuestras simpatías ideológicas, nuestras dudas y consultas. Y hacia ahí nos dirige, como si no existieran otras ideologías y otras dudas; otras preocupaciones en el mundo.

Es por ahí que hay buscar la intolerancia generalizada y la tendencia al fanatismo.

El algoritmo hace sonar el tañido de una única campana.

Es como la mujer embarazada que sale a la calle y ve más mujeres embarazadas que siempre.

Todo transcurre muy rápido. 

Un profesional de la salud mental habla del Trastorno Narcisista de la Personalidad, por citar un caso, en términos muy accesibles. Inmediatamente un experto en metabolismo trata sobre la función que cumple el hígado en el cuerpo, le sigue un fragmento de una entrevista a un músico célebre, pasa por otra a un escritor, continúa con la experta en productos de limpieza naturales. En el medio hay taroristas y stand upers, performers y periodistas; viajeros por el mundo, influencers de noventa años que dan cursos de educación física. Cada uno tiene su propio canal en Youtube. 

Lo que se vio en Tik tok fue sólo un flash.

El universo es muy atractivo y demasiada la información para el cerebro si no hay autocontrol.

El sistema simpático, que es el excitado, queda sometido a una sobreestimulación y apto para absorber muchísima información, de índole diversa, en escaso tiempo y a ritmo acelerado. 

Con ese entrenamiento, todo lo que demore más de cinco minutos resulta lento. 

Contra natura

La digitalización de la vida es antifisiológica.

Sin moverse de la casa, sin ver la luz del sol, se puede trabajar, pedir comida, pagar cuentas, participar de distintos grupos humanos, hacer cursos, buscar pareja; caminar en la cinta mecánica mientras se ve el décimo episodio de la serie. Se suspende para grabar y escuchar mensajes de audio, en tanto se espera que suene la chicharra del microondas que avisa que terminó de calentarse la comida.

Excepto el contacto cuerpo a cuerpo, casi todo se puede hacer a través de aplicaciones sin moverse del hogar.

El Covid inauguró la no presencialidad, que resultó muy funcional para las corporaciones.

Política analógica Sociedad digital

La gente que se dedica a la política desde organizaciones como los partidos o los sindicatos sigue en modo analógico.

Están más enfocados en las cuestiones anecdóticas de la política menor que en los constantes cambios que están alterando la naturaleza de la sociedad en la que pretenden influir.

La tecnología no tiene ética. No hay inteligencia sin ética.

El problema de la Inteligencia Artificial es que no es persona física ni jurídica. No está sujeta a Derecho.

La tragedia de desocupación que traerá la Inteligencia Artificial no está planteada en el discurso sindical, que sigue pensando que el problema de la Reforma de la Seguridad Social será el de trabajar hasta la extenuación, cuando la gente ya está siendo incontratable a los 48 ó 50 años de edad. 

El grave problema que ya está planteado es el desempleo en los mayores de 45.

Tal error en la formulación del problema se debe, en parte, al alejamiento de los dirigentes de los mercados laborales durante décadas. 

Uruguay no tiene uno, sino varios mercados laborales. 

Definir el mercado laboral como "la clase media (o "capas medias") y los trabajadores es un concepto del capitalismo incipiente.

La construcción del propio discurso, político partidario y sindical, es analógica para un auditorio digital.

Ambos discursos son propios de la Era industrial, como lo es la educación formal y los valores que se reivindican.

La mentada contradicción está en otra parte.

La gente es literalmente manejada por algoritmos.

Nadie la interpreta mejor que el algoritmo y satisface sus necesidades según exactas preferencias.

Las noticias que recibe corresponden a sus inclinaciones ideológicas y si a los dueños de las redes no les gusta lo que las personas publican, lo censuran sin que nadie se escandalice. "Nadie" excepto alguna publicación alternativa, círculo restringido o gente que es descalificada por una mayoría por dudar.

Magela Misurraco es Licenciada en Comunicación. Opción Publicidad y Relaciones Institucionales. Udelar


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2023-10-25T05:44:00

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