La máquina de gobernar

Ope Pasquet

19.10.2013

Al término ya del penúltimo año del quinquenio de Mujica, el gobierno y “la fuerza política” parecen agitados por un loco frenesí. Un repaso rápido e incompleto de algunos sucesos de los últimos días, ilustra bien lo que decimos.

El Frente Líber Seregni (FLS), sector frenteamplista encabezado por el vicepresidente de la república, Danilo Astori, cuestionó públicamente el proceso de adjudicación de los canales digitales de televisión y pidió el aplazamiento de la decisión. Al FLS le salieron al cruce, rápidamente,  el MPP y el senador Enrique Rubio, este último en términos particularmente duros. El presidente Mujica estaría considerando ahora la posibilidad de adjudicar seis canales y no cinco, como estaba previsto, para dejar contentos a todos. El cambio de último momento abriría, obviamente, un gran flanco a la impugnación jurídica de todo el proceso.

El presidente de AFE, Sr. Setelich, tuvo un incidente con el Director General del Ministerio de Economía y Finanzas, Sr. Apezteguía, que casi termina a las trompadas. Setelich renunció a su cargo pero Mujica dijo que no aceptaría su renuncia. El FLS hizo saber a la Torre Ejecutiva que si el belicoso jerarca del riel no se iba, sus representantes en el gobierno abandonarían sus cargos (Búsqueda de ayer, 17 de octubre, página 3). El presidente volvió a hacer lo contrario de lo que dijo que haría, y aceptó finalmente la dimisión de Setelich.

El director de DINAMA, Sr. Rucks, fue noticia toda la semana. Un día dijo a El País que recibía presiones de todos lados, gobierno incluido, lo que no parece muy oportuno en vísperas de un nuevo juicio en La Haya, contra Argentina, por la pretendida contaminación de UPM. Tras haber atendido así el frente externo, el Sr. Rucks enfocó sus energías a la interna del organismo que dirige y a través de un correo electrónico reprochó a cuatro altos funcionarios que hubieran recurrido administrativamente contra una decisión que entienden que los perjudica; les anunció que ya no serán convocados a las reuniones del equipo de dirección de la DINAMA. El gremio apoyó a los funcionarios, el ministro apoyó a  Rucks y se instaló una nueva controversia.

El director de Energía, Ramón Méndez, también dio que hablar. Para justificar la ubicación de la regasificadora  a 2,6 kilómetros de la costa, pese a la tumultuaria oposición de los vecinos en la audiencia pública en la que se discutió el asunto, descalificó la idea de situarla en mar abierto. Desde El Observador le recordaron que, en el año 2010, él mismo había planteado la posibilidad de  instalar la regasificadora a 40 km de la costa, al sur de la Isla de Flores. El "como te digo una cosa, te digo la otra", ha hecho escuela incluso entre los cuadros técnicos del gobierno.

 Para no ser menos que nadie, UTE aportó lo suyo al gran frangollo oficialista: dejó en suspenso la famosa "reestructura", a cuenta de la cual viene gastando millones de dólares desde hace años. El presidente del directorio, Ing. Casaravilla, se había puesto al hombro un proyecto que era resistido tanto por el gremio de funcionarios como por el de los profesionales y mandos medios del organismo, y que tampoco generaba entusiasmo en el directorio. Finalmente, Casaravilla desistió. Pero para cuando se produjo el desistimiento, ya se habían gastado siete millones de dólares en consultorías y se habían otorgado a cuenta de la reestructura, mejoras salariales por un importe equivalente a las dos terceras partes del costo total de aquélla, estimado en 40 millones de dólares. Si después de tan oneroso fracaso, el presidente de UTE puso su cargo a disposición del ministro Kreimerman, o si éste le solicitó que lo hiciera, no ha trascendido.

Mientras tanto, se supo que los días de clase perdidos por las huelgas docentes, no se recuperarán. Los sindicatos de la enseñanza demostraron, una vez más, que son ellos los que mandan. Asambleas de pocos centenares de militantes (cuando mucho) decidieron la huelga de miles de docentes y dejaron sin clases a centenares de  miles de niños y adolescentes. ¡Qué servicio esencial ni servicio esencial! Las "autoridades" de la enseñanza fantasearon públicamente con la idea de recuperar algunos de los días de clase perdidos, pero de entrada nomás los sindicatos les dijeron que no, y terminaron imponiéndose. Y además: los descuentos por las clases no dadas, en cómodas cuotas...¡Faltaba más!

Por el lado de la salud, el campanazo vino del Hospital de Clínicas. Su director, el Dr. Víctor Tonto, arremetió contra la anunciada apertura de un IMAE en el Hospital Militar, diciendo que carece de justificación técnica y que sólo se explica por efecto de presiones económicas y políticas. El Dr. Tonto se explayó luego acerca de una corruptela bien conocida: la implicancia de los médicos que, trabajando en el sector público, disponen el pase de pacientes a centros de asistencia privados de los que ellos son dueños o empleados, para que reciban allí servicios que serán pagados por la institución pública que los derivó al centro privado. Hasta ahora, nadie se dio por enterado.

Todavía falta un año para las elecciones, dirán los pesimistas de siempre. Quienes somos biológicamente optimistas preferimos pensar que se viene el verano, y que mientras están en la playa los del "país de primera" dejan de gobernar, aunque sea por un ratito. Un descanso nos hará bien a todos.

 

Ope Pasquet
2013-10-19T09:00:00

Ope Pasquet