Reafirmando las transformaciones deseables y posibles

Roberto Sansón Mizrahi

18.12.2023

Este capítulo cierra lo publicado en los últimos seis años reafirmando que es posible cambiar el rumbo y la forma de funcionar predominante basada en la codicia, el ninguneo de los demás y la destrucción del medio ambiente. Toca a las sociedades establecer un nuevo sendero de vida y convivencia orientado al bienestar de la humanidad y el firme cuidado de la Madre Tierra.

En diversos artículos reflexionamos sobre cómo emergió la situación presente con tanta carga de odio y egoísmo, cuánto fue ocultado y sostenido con engaños y desinformación. También se fueron señalando algunos rasgos salientes de las trasformaciones deseables y posibles.

Hemos recogido de muchos pensadores cuales son los motores que reproducen la apropiación de la riqueza y cómo funcionan. Son potentes e inmisericordes mecanismos de sometimiento. Al conocerlos queda explicitada la relación que existe entre la agresiva cúspide concentradora y el duro derrotero social y ambiental impuesto a la humanidad.

Hemos cuidado de no deslizarnos hacia propuestas únicas que no respetan la singularidad de los tiempos y las culturas del mundo contemporáneo. Una heterogeneidad que es un potente activo cuando se la aprovecha integrando la diversidad de ideas, intereses y perspectivas.

Cubrimos los diferentes niveles del funcionamiento de las sociedades, aunque invirtiendo las prioridades que suelen imponerse consagrando lo macro, luego lo demás y al final como tema residual, la base popular de la sociedad y el medio ambiente. Invertimos la importancia no por un capricho o demagogia, sino porque desde esa base popular y el medio ambiente emerge la imperiosa necesidad de trasformar la perspectiva que se nos ha impuesto como hegemónica. La enunciamos, la sustentamos con razones y avanzamos aportando modalidades de cómo implementar esta desafiante perspectiva.

Una diferente perspectiva de prioridades que encara como eje orientador las desgarradoras desigualdades de mayorías que sobreviven o mueren por factores evitables mientras pocos se regodean en la opulencia. Estas minorías han apropiado el timón del destino común, controlan las decisiones estratégicas, dan voz a sus acólitos y silencian a los que enfrentan su poder. Este es un antagonismo fundante del desastre contemporáneo que se consolidó en pocas décadas. El rumbo impuesto no aseguró estabilidad social y ambiental sino generó tremendas tensiones que se han represado arteramente. Muy difícil que esta situación perdure por más poder que procure sostenerla. Lo grave es que los desenlaces son inciertos; son muy diversas las fuerzas en ebullición. Si no se establecen salidas justas a la concentración-exclusión, si no se combina firmeza con cordura, pueden estallar remolinos de furias, frustraciones y retaliaciones.

Es crítico, aunque no sencillo, desmontar el andamiaje económico y cultural que sustenta la opresión. Requiere acuerdos geopolíticos que aseguren justicia, equidad y resolución pacífica de las controversias a nivel global para no reproducir antagonismos y enfrentamientos. Esto alentaría a que cada país escoja soberanamente cómo desmontar los problemas que agobian.

La realidad enseña más que nadie si se la observa y vive sin anteojeras. Que es suicida agredir al planeta, que es maldito e insostenible encumbrar a pocos a costa del bienestar general.

También enseña por donde debieran orientarse los nuevos senderos de vida. Las palabras son importantes y lo serán más si inducen acciones que implementen sus significados. Lo crítico es enaltecer a las mayorías desmontando todo aquello que las castiga y cuidar respetuosamente de la Madre Tierra.

Para lograrlo hay mucho y diverso por hacer. Entre otras trasformaciones las siguientes, en el orden y la profundidad que cada sociedad decida.

  • Cerrar por completo el drenaje delictivo de recursos.
  • Establecer justicia tributaria gravando a los mayores patrimonios.
  • Energizar a la economía popular con asistencia de excelencia en sectores promisorios como la economía del conocimiento, la soberanía alimenticia, los cuidados y otros.
  • Desarrollar al máximo posible la soberanía energética de cada país.
  • Adaptar la matriz productiva para evitar recurrentes estrangulamientos.
  • Democratizar las cadenas de valor para que todos sus integrantes compartan con equidad los resultados.
  • Eliminar situaciones y acciones oligopólicas asegurando justicia entre trabajadores, productores, consumidores y el financiamiento público.
  • Atención universal de salud, educación y saneamiento ambiental.
  • Vivienda digna para todos.
  • Comprender la importancia de lo económico como instrumento y no como regidor de la marcha colectiva.
  • Transformar las actuales democracias capturadas en democracias plenas.
  • Mejorar permanentemente la gobernanza pública
  • Democratizar el sistema de justicia y el de los medios de comunicación.
  • Dar paso a nuevos liderazgos alentando el interés de los jóvenes a ser parte de procesos de transformación.

Hemos puesto el foco sobe estos aspectos del devenir social. Por cierto, existen otras áreas de estratégica importancia en aspectos de valores, culturas, psicología de masas, formación de las subjetividades, fragmentación social y, en el núcleo central, el crítico aspecto del Poder. Poder de hacer, poder de someter, poder de liberar.

Este capítulo cierra un ciclo de seis años. Seleccionaremos y editaremos algunos artículos para conformar un nuevo libro de Desarrollo de la Colección Opinión Sur. Los anteriores fueron Un País para todos (2006), Ajustar el rumbo, salir de la crisis hacia un desarrollo sustentable, este también en inglés Adjusting the course (2009), Crisis global, ajuste o transformación (2012) y Democracias capturadas (2017)    

Agradecemos a quienes nos han acompañado todos estos años y ojalá lo sigan haciendo desde el año 2024 con las nuevas propuestas que estamos pensando desarrollar.

Roberto Sansón Mizrahi
2023-12-18T06:14:00

Roberto Sansón Mizrahi. Economista, planificador regional y urbano, consultor, dirigió empresas, autor de Un país para todos, Crisis global: ajuste o transformación, Democracias capturadas y otros libros, Co-Editor de Opinión Sur www.opinionsur.org.ar