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MONTEVIDEO (Uypress) - Se presentó en la Sala Camacuá el libro Vendedores de cuchillos, una investigación de tres destacados autores sobre el lavado de activos en Uruguay.

La actividad se desarrolló el pasado 29 de noviembre y reunió a los tres coautores del libro: el contador Daniel Espinosa, exfuncionario del Banco Central del Uruguay y extitular de la Secretaría Nacional Antilavado; el contador Ricardo Gil Iribarne, quien también fue Secretario Nacional Antilavado, expresidente de la Junta de Transparencia y Ética Pública y hoy en día integra la Comisión Fiscal de AEBU; y el sociólogo y doctor en Ciencia Social Gabriel Tenenbaum, quien trabaja mucho sobre estos temas y ya publicó otro libro, Los protectores del capital (2022).

La dinámica fue de charla, moderada y guiada por el periodista Lucas Silva, a través de la cual los autores fueron contando parte de los contenidos del libro y diagnosticando las problemáticas que rodean al combate del lavado de dinero en nuestro país.

En nombre del sindicato, la apertura estuvo a cargo de la consejera central Mariana Larraz, quien resaltó "el compromiso que AEBU tiene con esta temática". "Sabemos que es un tema que nos toca muy de cerca, y día a día desde nuestro lugar de trabajo bregamos por un sistema financiero sano, transparente y confiable", sostuvo.

Larraz hizo referencia a las propuestas que AEBU incluyó en su documento programático sobre el combate al lavado de activos. Algunas de ellas son el amento de recursos a organismos y dependencias vinculadas a la lucha contra el lavado, el desarrollo de programas de capacitación para funcionarios, la revisión de los artículos de la LUC vinculados a las operaciones en efectivo y el límite de los procesos abreviados penales por lavado de activos.

Los entretelones del libro

Según contaron sus autores, Vendedores de cuchillos contiene una decena de casos de lavado de dinero, que demuestran que, contrariamente a algunas visiones, "en Uruguay ha pasado de todo". "El lavado en Uruguay ha sido grave y ha sido una punta de lanza en el continente", explicó Daniel Espinosa, quien resumió que "pasó, está pasando y puede volver a pasar si no hacemos algo".

Ricardo Gil Iribarne relató que los tres autores compartían "la preocupación por agitar un poco este tema y ponerlo en la palestra en el período electoral", y que el proceso duró unos seis meses de trabajo.

"Fue todo muy sencillo, sabíamos que compartíamos una visión común sobre muchas cosas. Lo bueno del proceso es que los tres hicimos todo el libro, participamos en todo momento, y eso permitió nutrirnos mucho, además del producto como tal que se vio beneficiado", señaló Gabriel Tenenbaum.

Para Espinosa, la preocupación central "era tratar de llevar al público la conexión entre el lavado y el crimen organizado", ya que muchas veces, al decir de Gil Iribarne, "es un delito que no está en la cabeza de la gente porque nadie se siente víctima".

Tanto Espinosa como Gil Iribarne trabajan sobre este tema hace casi veinte años y afirmaron que "antes se hablaba poco", sin embargo ahora "hay una desproporción entre que hay más sensación y más preocupación, pero la persecución ha bajado mucho". "Se habla mucho de lavado, pero no se concretan acciones de combate", concluyeron.

Imagen de portada: Daniel Espinosa, Ricardo Gil Iribarne y Gabriel Tenenbaum | Fotos: Ignacio Álvarez Vigna