UY Press - Agencia uruguaya de noticias

16.02.2025

MÚNICH (ANSA/por el enviado Stefano Intreccialagli) – Una reunión urgente, convocada tras el desastroso resultado de la Conferencia de Múnich, para intentar devolver a Europa la voz que Estados Unidos le echó por la puerta grande.

Emmanuel Macron convoca a las potencias europeas en París a una reunión "informal", pero crucial para transformar lo que hasta ahora es una vía de doble sentido ruso-estadounidense en un esquema compartido con Europa en el camino hacia un alto el fuego en Ucrania.

Encontrar la estrategia adecuada para convencer a Washington de que los socios europeos deben contar en el camino hacia la paz.

Estados Unidos está corriendo a un ritmo que Europa tiene dificultades para mantener: según Bloomberg, la administración Trump apunta a una tregua antes de Pascua, mientras que en Riad se va a celebrar una reunión entre una delegación estadounidense y una rusa.

Ucrania no estará allí, no es la estrategia del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky sondear el terreno con reuniones preparatorias: el líder ucraniano pretende sentarse a la mesa solo con Putin y con un plan elaborado entre Estados Unidos, Ucrania y la UE. Pero mientras Kiev y Bruselas presionan para no quedar fuera, las negociaciones sobre la tregua siguen siendo un diálogo entre Washington y Moscú.

Esto especialmente después de que el enviado estadounidense, Keith Kellogg, excluyera a Europa de la mesa y el Kremlin alabara al presidente estadounidense -cuyas palabras "prueban su compromiso con la paz"- subrayando que el magnate es bienvenido en Rusia en cualquier momento, al igual que cualquier otro líder extranjero sería bien recibido si decidiera participar el próximo 9 de mayo en las celebraciones en Moscú por el 80mo Día de la Victoria, aniversario ruso de la derrota del nazismo.

En este marco, el Eliseo -consciente de la necesidad de que los europeos hagan "más y mejor" para garantizar su seguridad- convocó a una reunión, confirmada tras horas de incertidumbre, para encontrar una estrategia que permita a Europa no quedar fuera del juego.

El presidente francés, Emmanuel Macron, recibirá a "los principales países europeos" para debatir sobre la "seguridad europea", declaró el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot.

Participarán los jefes de gobierno de Alemania, el Reino Unido, Italia, Polonia, España, los Países Bajos y Dinamarca, así como el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, la presidenta de la UE, Ursula Von der Leyen, y el secretario de la OTAN, Mark Rutte.

El líder galo podrá partir de un punto fuerte dado por los números: en su conjunto, según un análisis del Instituto Kiel, Europa supera a Estados Unidos en términos de ayudas a Ucrania.

La primera destinó 70.000 millones de euros en ayuda financiera y humanitaria y 62.000 millones de euros en ayuda militar, frente a 64.000 millones de euros en ayuda militar y 50.000 millones de euros en créditos financieros y humanitarios de Estados Unidos.

Luego está el tema de las sanciones a Rusia por parte de la UE, y por lo tanto, la palanca para tener voz en las negociaciones.

Pero en la reunión, también se discutirá qué capacidades de defensa podría proporcionar Europa para dar a Ucrania garantías creíbles de seguridad, incluyendo la posibilidad de la adhesión automática de Kiev a la OTAN en caso de una clara violación del alto el fuego por parte de Rusia.

Una idea promovida por algunos senadores estadounidenses y apoyada por varios líderes europeos, como el finlandés Alexander Stubb.

Además, la cumbre podría ser una oportunidad para responder a la petición de Estados Unidos de comprometer tropas en una fuerza de estabilización en caso de tregua, opción que divide a los líderes europeos pero que está sobre la mesa, como recordó Zelensky en Munich.

Al final de una reunión informal en Munich con algunos ministros de Asuntos Exteriores de la UE, la Alta representante europea, Kaja Kallas, dijo que pronto se anunciarán iniciativas.

Mientras tanto, en vísperas de la cumbre de París, Barrot se declaró convencido de que "los europeos se verán implicados de una forma u otra en las discusiones" para poner fin a la guerra.

"El papel de Estados Unidos es convencer a Putin para que negocie" y creen que "pueden hacerlo a través de una mezcla de presión y diálogo".

Pero en última instancia, "solo los ucranianos pueden decidir dejar de luchar, y nosotros les apoyaremos hasta que tomen esa decisión".

Mientras tanto, lejos de las discusiones diplomáticas la guerra continúa en Ucrania, en detrimento de la población: "Hoy más de cien mil personas en Mykolaiv se quedaron sin calefacción debido a un ataque ruso", informó Zelensky.

"Esto no es lo que hacen los que realmente quieren la paz y se preparan para las negociaciones", resaltó.

Imagen: ANSA/EPA