Italia - Libia

Italia - Libia: una relación atormentada


ROMA, 2 Mar (UYPRESS) – Cuando Muammar el Gadafi expulsó en 1979 a los últimos 20 mil colonos italianos residentes en Libia, culminaba un proceso iniciado con la conquista por parte del reino de Italia del país norafricano en 1912, aprovechando la debilidad del imperio otomano que lo controlaba.

La presencia italiana se afianzó con la llegada al poder de Benito Mussolini en Italia (1922). Sin embargo, esto trajo aparejado el incremento de los problemas derivados del régimen colonial. A pesar de la extremada pobreza de la mayor parte del territorio, el gobierno italiano int

En 1934, en pleno periódo fascista, el gobernador Italo Balbo unió las dos colonias italianas de Tripolitania y Cirenaica, creando la llamada Libia italiana, cuyos límites correspondían a la actual Libia. Balbo hizo prosperar a su colonia asentando muchos colonos italianos en villas y ciudades construidas para ellos. En 1940 había casi 120.000 italianos en Libia, o sea el 13% del total de la población de ese país.

Durante la Segunda Guerra Mundial, se libraron en suelo libio importantes batallas en lo que se llamó la guerra del desierto, como la de Tobruk, que en gran medida decidieron la suerte de la guerra en esa región. Tras un ataque italiano a Egipto en 1940, los contraataques británicos requirieron la intervención de fuerzas alemanas. El famoso Afrika Korps, mandado por el general Rommel, combatió junto a los Italianos contra los aliados dirigidos por Montgomery. En 1943 los Italo-alemanes fueron finalmente derrotados y las tropas del Eje expulsadas de la costa norteafricana. En el periodo post-bélico la mayor parte de Libia quedó bajo administración británica, salvo la zona de Fezzan, controlada por Francia.En 1947 Italia se quedó sin colonias a causa del Tratado de Paz después de la segunda guerra mundial y así perdió la Libia italiana.

Más de 60 años, en el 2008 Italia firmó un  Tratado de Amistad con Libia que contenía importantes acuerdos en la lucha contra la inmigración ilegal  y que preveía inversiones italianas por 5.000 millones en infraestructuras en Libia y que fue suspendido por el gobierno de Berlusconi – el gran impulsor de las relaciones carnales con Gadafi – el pasado 27 de febrero del 2011. Con gran sentido del oportunismo.

Las relaciones económicas entre ambos países son enormes. El 32% del petroleo que exporta Libia va para Italia, la Cámara de Comercio italiana en Libia cuenta con 180 empresas, las participaciones financieras libias en compañías italianas tiene un valor de alrededor de 3.600 millones de euros. En Unicredit, uno de los bancos italianos más grandes, Libyan Investment Authority junto con el Banco Central de Trípoli controlan el 7,4% del capital (2.800 millones). Una cuota parecida (7,5%), aunque de valor muy inferior (13 millones), es la que Libia tiene en el equipo de fútbol Juventus. Trípoli posee participaciones también en grandes grupos públicos italianos: el 2% de Finmeccanica (100 millones) y el 1% de Eni (700 millones). Un compromiso poco relevante para el sector de la energía que Gadafi pensaba aumentar: se había comprometido a alcanzar el 10% del (Ente Nazionale Idrocarburi) Eni.

La presencia de capital libio en Italia no es nueva: en 1976 Gadafi, a través de Libyan Arab Foreign Investment Company, compró el 10% de Fiat. Una inversión inmejorable para la cajas vacías del grupo. Los capitales libios se retiraron de la automovilistica sólo en 1986 cuando las tensiones entre Trípoli y Washington empezaron a amenazar Fiat en EEUU.  El ENI planeaba invertir, en 20 años, más de 18.000 millones de euros en Libia.

Además de lo sustantivo y sólido de las relaciones económicas entre ambos países, están las anécdotas, que completan el cuadro.

En su visita a Italia en e. 2010, para celebrar el segundo aniversario de la firma del tratado entre ambas naciones, el coronel Muamar el Gadafi llegóm escoltado por 200 amazonas- guardaespaldas y en una recepción en la embajada Libia en Roma recibió a tres bellas jóvenes italianas que se convirtieron al Islam.

El show de Gadafi incluyó un desfile por las calles de Roma con la participación de 30 corceles de raza bereber especialmente traídos para la ocasión. Durante toda la visita Gadafi en uniforme de gala llevaba puesta una visible foto de del héroe libio de la resistencia Omar al-Mukhtar, lider de la revuelta contra la colonización de Italia, conocido como 'El León del Desierto' que fue asesinado por orden del Duce, Benito Mussolini en 1931.

No son buenos tiempos para Gadafi, pero tampoco para su aliado y amigo Silvio Berlusconi.

Internacionales
2011-03-02T12:18:00

UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias