POLÉMICA POR EL CHAT DEL PENTÁGONO SOBRE PLANES DE GUERRA EN YEMEN
Trump se alinea con Vance: "Europa parásita"
25.03.2025
WASHINGTON (ANSA/Por Benedetta Guerrera) – La tormenta se desata por el chat del Pentágono sobre los planes de guerra en Yemen, compartido por error con el director de Atlantic.
Donald Trump no solo no admite que hubo una grave falla en la seguridad en su administración, sino que defiende a su asesor que envió la invitación al periodista Jeffrey Goldberg.
Pero contraataca y apoya plenamente aquellos mensajes en los que su vice, J.D. Vance, vuelve a insultar a los europeos.
"Estoy de acuerdo con él, son parásitos, lo han sido durante años", afirmó el magnate neoyorquino.
Trump salvó a su consejero para la Seguridad Nacional, Mike Waltz, quien accidentalmente invitó a Goldberg al chat, afirmando que "ha aprendido la lección y es un buen hombre".
"No tiene que disculparse, está haciendo lo mejor que puede", insistió el presidente estadounidense ante las preguntas de los periodistas acerca del escándalo.
"Nuestra seguridad nacional está más fuerte que nunca, tenemos un grupo increíble", aseguró el comandante en jefe, y reiteró que "no se ha compartido ninguna información clasificada".
Trump asimismo defendió el uso de la app Signal: "todo el mundo lo hace incluso en ambientes militares", pero admitió que "estas cosas suceden cuando estás fuera de la Sala de Situación", el lugar más seguro del mundo, y que se hará "una verificación". Lo cual no es una investigación de todos modos.
Y luego, el magnate se desquitó con el editor de la revista, llamándolo "un enredador que se promociona a sí mismo" y que es "malo para los estadounidenses".
Mientras, la Casa Blanca acusó en un comunicado a "los demócratas y sus aliados en los medios de haber inventado el caso para desviar la atención de los éxitos de Trump".
Sin embargo, la contraofensiva de la administración puede no ser suficiente para disminuir la controversia. En efecto, como subrayó el propio Goldberg, Waltz y los otros 18 altos funcionarios presentes en el grupo "hutíes" pueden haber cometido diversas violaciones.
La primera es el uso de Signal para información tan sensible, que normalmente se procesa en sistemas gubernamentales cifrados que son inaccesibles incluso en caso de robo o pérdida de un teléfono celular.
La segunda es por haber incluido a un periodista revelando información clasificada, una filtración no intencionada, pero que podría constituir una violación a la Ley de Espionaje.
La tercera se basa en que una vez abandonado el chat la información se perdía, mientras que los mensajes de funcionarios públicos se consideran documentos a preservar.
El caso seguramente tendrá seguimiento en los próximos días, ya que Goldberg, uno de los periodistas más respetados de Estados Unidos, insinuó que tiene la intención de publicar otras partes de la conversación.
Paralelamente a la tormenta de seguridad, se está gestando una crisis diplomática después de un intercambio en el infame chat al menos irrespetuoso hacia Europa entre Vance y el secretario de Defensa, Pete Hegseth.
"No soporto tener que salvar a Europa otra vez", escribió el número dos de Trump, en referencia a las incursiones contra los hutíes en Yemen.
"Comparto plenamente tu odio hacia el parásito europeo, es patético", respondió el jefe del Pentágono. Palabras duras de las que Trump no se desmarcó, al contrario, las compartió.
"Estoy de acuerdo, son parásitos. Lo han sido durante años, pero no los culpo, culpo a (Joe) Biden", dijo el presidente estadounidense, refiriéndose al intercambio comercial y los aranceles. Y mientras la Unión Europea guarda silencio, Gran Bretaña e Italia respondieron a Vance.
El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, recordó a Washington que, con la misión Aspides, "protegemos nosotros mismos nuestros buques mercantes, ya que nuestra Armada ha derribado varios drones lanzados por los hutíes contra nosotros".
"Quizás -subrayó el jefe de la Farnesina- Vance, que acaba de llegar, no está al tanto de los antecedentes, pero estamos integrados en una serie de operaciones, incluso con Estados Unidos y el Reino Unido. La Marina italiana está ahí, protegemos nuestros buques mercantes, no los protegen otros, y protegemos a los demás como otros nos protegen a nosotros. Esto es poner los puntos sobre las íes, con gran respeto y sin odiar a nadie".
Imagen: ANSA/AFP
Todos los Derechos Reservados. © Copyright ANSA