UY Press - Agencia uruguaya de noticias

06.05.2024

MONTEVIDEO (Uypress/Esteban Valenti) - El escándalo desatado el 8 de marzo con acusaciones contra Yamandú Orsi a través de un video de Romina Papasso y luego con una denuncia ante la policía y la fiscalía de parte de otra trans prostituta, Paula Díaz, tuvo un episodio explosivo en el programa "Santo y Seña" donde ambas desmintieron todas las acusaciones contra Orsi.

Escuchando y leyendo todo el proceso desde el comienzo y los antecedentes de los personajes se cerró una etapa para un episodio repugnante, falso y creado como una provocación política contra uno de los principales candidatos presidenciales. Quedó claro que era una mentira, montada en cada detalle por las dos responsables. Con pruebas aportadas por Paula Díaz.

La primera pregunta luego de este desmentido total e inexorable es: ¿ellas organizaron todo solas y gratis? No se lo cree nadie. Incluso a lo largo del programa se presentaron materiales elaborados y utilizados para la falsa acusación, fotos, documentos, información que de ninguna manera pudo haber sido producido por Romina, solo los imbéciles se pueden creer ese paquete. Los cómplices en la política, como el senador Sebastián Da Silva o en los muy pocos medios que antes de comprobar nada, le dieron toda la manija posible.

Otra pregunta necesaria y que no se mencionó, Romina habló en su video de "plata y fama" pero nadie preguntó a fondo a Paula Díaz, ni investigó de donde salió la plata. Y hubo mucha plata, en todo el proceso, en comprar testimonios, en pagar miles de dólares (entre 30.000 y 40.000) en las redes para que circule en todo el país como un reguero, manejados desde el exterior. ¿Eso lo hizo Romina? No nos traten de idiotas, o no nos hagan sentir la vergüenza de una dirigente del Frente Amplio, Patricia González, preocupada en una audición de Radio (La Tertulia) de como quedarían las trans después de este episodio. Pueden escuchar el programa y sentir la vergüenza que yo sentí. Y no gastar una sola palabra de solidaridad con Orsi.

Lo voy afirmar con todas las letras, la militante blanca, que hizo todo tipo de tropelías, que fue condenada a siete meses de cárcel, que es una provocadora no hizo esto sola, es una operación de algún dirigente del Partido Nacional, que además puso la plata y señaló el objetivo, o mejor dicho los objetivos. Por qué si bien no hay que confundir el caso Orsi con el del ex senador Gustavo Penadés, la fuente, el responsable es el mismo y es del Partido Nacional.

La diferencia es que contra Penadés, Paula Díaz, no presentó una sola prueba de que era una falsedad, (grabaciones o post) de Papasso, además el ex senador está preso por hacer todo lo posible por torcer el proceso, con uso de funcionarios públicos, policías, jefe de cárceles y hasta ministros, etc. Las pruebas contra el dirigente blanco están probadas con testimonios de menores que nada tienen que ver con Romina Papasso. También el desmentido de la Paula Díaz, es otra maniobra, sin ninguna prueba y esta es la diferencia fundamental con el caso de Orsi. Y muestran como es el fuego amigo en el Partido Nacional. Y no es la primera vez, practican la antropofagia.

¿A quién le sirve estas dos operaciones? A un dirigente del Partido Nacional que está disputando la interna y le interesaba destruir el herrerismo, la lista 71 y después afectar a su casi seguro contrincante para octubre y noviembre. Le sirve a una sola persona y a un solo sector. Piensen...

La fiscal de Ciudad de la Costa de segundo turno, Sandra Fleitas, que tiene a su cargo la acusación contra Orsi, declaró que no tratará con urgencia este tema y le llevará 50 días, es decir casi todo el proceso electoral hacia las internas. El nivel y la imagen de la fiscalía es otra vergüenza, desacredita a la justicia. Mirando un minuto las declaraciones en TV tanto de Romina como de Díaz, cualquier persona de mediana inteligencia se pueden deducir las falsedades. Si dejan a la misma fiscal, la Fiscalía de Corte se hace cómplice de esta vergüenza. 50 días para resolver sobre un escándalo de estas características. No creo que haya complicidad, es simplemente incapacidad.

Vamos a estar muy atentos a que se hará en la Justicia con estos dos personajes y siga investigando en serio no dentro de dos años o 50 días, que hay detrás de todo esto.

Lo voy a repetir: hay un sector o un dirigente importante del Partido Nacional implicado en toda esta maniobra, en su montaje y financiación. Expulsar a Romina Papasso ahora, no resuelve nada. Prueba que ellos, que conocían perfectamente al personaje, mejor dicho a los personajes, no hicieron nada nada hasta ahora, les servía y tenía padrinos.

Que haya sido un programa periodístico el que destapó el tarro de basura, pero parcialmente, con muchas preguntas pendientes y que la justicia actúe de esta manera es muy preocupante. También sería bueno que el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho se interrogue con rigor sobre su papel. Han jugado en muchos casos un papel muy positivo, pero en esto están adentro.

Esta operación de política sucia de los peor necesita: primero, de plata, mucha plata; un aparato técnico para difundir en las redes; medios cómplices; personajes comprables y no se trata de "loquitos", se trata de personas que conocían perfectamente lo que estaban haciendo. Obviamente que recurren a trans prostitutas porque tienen un perfil adecuado para montar estas operaciones.

Este no es un episodio más, es un insulto a toda la sociedad, a nuestra credibilidad, a la zonas oscuras y putrefactas arrastradas a la política para hacerse los modernos y los sensibles y del papel cada vez más terrible del dinero, seguramente mal habido, coimeado.

Si no sentimos repugnancia y rabia, es que ya estamos cayendo como sociedad en un tobogán barroso inevitable.